La Balanza de Pagos se ha puesto de actualidad, por nuestro crónico déficit comercial, hoy explicamos que es y cuales son sus partes esenciales...
La Balanza de pagos es un documento contable que nos aporta información sobre las entradas y salidas al exterior de mercancias, servicios, capitales y activos y pasivos financieros. Por tanto, se compone de estas 3 secciones básicas: Cuenta Corriente, Capital y Financiera. Pero antes de continuar, observen la imagen.
Utiliza el método de a Partida Doble, lo que quiere decir que su saldo final siempre será 0, de manera que si arrastramos un déficit por Cuenta Corriente y de Capital, caso español, esto provocara un superavit en la Cuenta Financiera, es decir, un aumento de los pasivos, necesitaremos financiarnos desde el exterior, pero vayamos por partes.
Esta sección nos aporta información sobre 4 aspectos básicos, En primer lugar el saldo exportador (Exportación-Importación), tanto de bienes como de servicios, luego están los saldos de las rentas de los factores productivos, como pueden ser dividendos y en última instancia las transferencias corrientes, como las remesas de emigrantes.
Como vemos, nos estamos refiriendo a nuestras operaciones con el exterior, no a las internas, que se verán reflejadas, entre otros, en la Contabilidad Nacional. Miren la siguiente imagen y veremos como se relacionan estos saldos y cuales suelen ser las consecuencias de que tengan déficit o superavit.
En primer lugar tenemos el saldo comercial, este solo tiene en cuenta los bienes (un automovil, etc) y un déficit indica que compramos más de lo que vendemos, por tanto nuestras exportaciones no financian a las importaciones. Algo similar ocurre con los Servicios, España suele tener superavit en ellos, sobre todo en el Turismo.
Debido a la terciarización (desarrollo del sector servicios) de nuestra economía, el saldo de las dos conjuntas es muy importante, porque indicaría que nos financiamos fuera o financiamos al exterior, en lo que a bienes y servicios se refiere, lo ideal es que financiemos nosotros.
La segunda nos aporta información sobre las corrientes de capitales, desde nuestro país y hacia el exterior. Se compone de dos grupos importantes: las transferencias de capital, como fondo europeos y las inversiones en activos no financieros, como compras de viviendas por extranjeros en nuestro país.
Si miran la imagen anterior, verán que está muy relacionada con la Cuenta Corriente, la suma de la Cuenta Corriente y de Capital, nos ofrecerá un saldo positivo (capacidad de financiación) o negativo (necesidad de financiación). En el caso español, el problema viene de nuestro déficit en la Balanza Comercial.
Y el tercer y último apartado corresponde a las Variaciones Netas (aumentos-disminuciones) de Pasivos Financieros y Activos Financieros. Si vemos la imagen del inicio, observamos 3 grupos, Inversiones Financieras (como acciones o inversiones en industrias), Préstamos y Depósitos y por último las variaciones de reservas, los errores y omisiones se utilizan solo para cuadrar los saldos. Pero vean esta otra imagen.
Si se fijan un déficit en Cuenta Corriente+Capital, provocará un superavit en la Cuenta Financiera, las variaciones de pasivos netos serán mayores que las de activos (necesitamos pedir prestado) y a la inversa. Esto es esencial, porque nos indica si nuestra deuda exterior aumenta o disminuye, puesto que esta hay que pagarla.
Por último están las variaciones de reservas, estas son las divisas que otros bancos tienen en diferentes monedas. Cuando exportamos, quien nos compra, a su vez debe comprar euros para pagarnos y si importamos, nosotros vendemos euros y compramos otras monedas, pero miren la última imagen y lo verán más claro.
Un déficit en la Balanza de Pagos hace que las reservas disminuyan y un superavit que aumenten, por la ley de oferta y demanda, esto provocará variaciones en el Tipo de Cambio. Si aumenta la demanda de euros, por un incremento de las exportaciones, el euro se aprecia y a la inversa, por poner el ejemplo más habitual.
Para resumir, las relaciones con el exterior son esenciales y por eso la Balanza de Pagos es un instrumento muy útil. Por otro lado, los déficits crónicos con el exterior, caso de nuestra balanza comercial, provocan dos problemas, uno que este hay que financiarlo y el otro, una salida de divisas que puede acabar por agotar las reservas de esa moneda.
Y hasta aquí por hoy, cualquier duda, puedes utilizar el formulario o los comentarios y gracias por venir.
La Balanza de pagos es un documento contable que nos aporta información sobre las entradas y salidas al exterior de mercancias, servicios, capitales y activos y pasivos financieros. Por tanto, se compone de estas 3 secciones básicas: Cuenta Corriente, Capital y Financiera. Pero antes de continuar, observen la imagen.
Utiliza el método de a Partida Doble, lo que quiere decir que su saldo final siempre será 0, de manera que si arrastramos un déficit por Cuenta Corriente y de Capital, caso español, esto provocara un superavit en la Cuenta Financiera, es decir, un aumento de los pasivos, necesitaremos financiarnos desde el exterior, pero vayamos por partes.
Cuenta Corriente
Esta sección nos aporta información sobre 4 aspectos básicos, En primer lugar el saldo exportador (Exportación-Importación), tanto de bienes como de servicios, luego están los saldos de las rentas de los factores productivos, como pueden ser dividendos y en última instancia las transferencias corrientes, como las remesas de emigrantes.
Como vemos, nos estamos refiriendo a nuestras operaciones con el exterior, no a las internas, que se verán reflejadas, entre otros, en la Contabilidad Nacional. Miren la siguiente imagen y veremos como se relacionan estos saldos y cuales suelen ser las consecuencias de que tengan déficit o superavit.
En primer lugar tenemos el saldo comercial, este solo tiene en cuenta los bienes (un automovil, etc) y un déficit indica que compramos más de lo que vendemos, por tanto nuestras exportaciones no financian a las importaciones. Algo similar ocurre con los Servicios, España suele tener superavit en ellos, sobre todo en el Turismo.
Debido a la terciarización (desarrollo del sector servicios) de nuestra economía, el saldo de las dos conjuntas es muy importante, porque indicaría que nos financiamos fuera o financiamos al exterior, en lo que a bienes y servicios se refiere, lo ideal es que financiemos nosotros.
Cuenta de Capital
La segunda nos aporta información sobre las corrientes de capitales, desde nuestro país y hacia el exterior. Se compone de dos grupos importantes: las transferencias de capital, como fondo europeos y las inversiones en activos no financieros, como compras de viviendas por extranjeros en nuestro país.
Si miran la imagen anterior, verán que está muy relacionada con la Cuenta Corriente, la suma de la Cuenta Corriente y de Capital, nos ofrecerá un saldo positivo (capacidad de financiación) o negativo (necesidad de financiación). En el caso español, el problema viene de nuestro déficit en la Balanza Comercial.
Cuenta Financiera
Y el tercer y último apartado corresponde a las Variaciones Netas (aumentos-disminuciones) de Pasivos Financieros y Activos Financieros. Si vemos la imagen del inicio, observamos 3 grupos, Inversiones Financieras (como acciones o inversiones en industrias), Préstamos y Depósitos y por último las variaciones de reservas, los errores y omisiones se utilizan solo para cuadrar los saldos. Pero vean esta otra imagen.
Si se fijan un déficit en Cuenta Corriente+Capital, provocará un superavit en la Cuenta Financiera, las variaciones de pasivos netos serán mayores que las de activos (necesitamos pedir prestado) y a la inversa. Esto es esencial, porque nos indica si nuestra deuda exterior aumenta o disminuye, puesto que esta hay que pagarla.
Por último están las variaciones de reservas, estas son las divisas que otros bancos tienen en diferentes monedas. Cuando exportamos, quien nos compra, a su vez debe comprar euros para pagarnos y si importamos, nosotros vendemos euros y compramos otras monedas, pero miren la última imagen y lo verán más claro.
Un déficit en la Balanza de Pagos hace que las reservas disminuyan y un superavit que aumenten, por la ley de oferta y demanda, esto provocará variaciones en el Tipo de Cambio. Si aumenta la demanda de euros, por un incremento de las exportaciones, el euro se aprecia y a la inversa, por poner el ejemplo más habitual.
Para resumir, las relaciones con el exterior son esenciales y por eso la Balanza de Pagos es un instrumento muy útil. Por otro lado, los déficits crónicos con el exterior, caso de nuestra balanza comercial, provocan dos problemas, uno que este hay que financiarlo y el otro, una salida de divisas que puede acabar por agotar las reservas de esa moneda.
Y hasta aquí por hoy, cualquier duda, puedes utilizar el formulario o los comentarios y gracias por venir.
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